miércoles, 15 de julio de 2009

Cuando las sirenas tenían alas...

Las sirenas, en la antigüedad, fueron seres imaginarios muy distintos a lo que en la actualidad conocemos. Estos seres fabulosos nacieron en la mitología griega. En su forma original eran seres híbridos con cuerpo de ave y cabeza de mujer. Estaban dotadas de un hermoso canto que atraían a los marineros, los cuales encallaban sus naves y eran devorados por esta estas criaturas.
Eran hijas de Aqueloo y la musa Calíope, sus nombre eran: Lidia, que tocaba la flauta, Parténope, la lira y Leucosia leía y cantaba versos. Según las leyendas, en un principio tenían formas humanas y eran compañeras de Persefone, hija de Zeus (dios supremo) y Demeter (diosa de la fecundidad). Cuando Persefone fue raptada por Hades (dios del inframundo), la madre de esta, Demeter, las transformó estos seres en castigo por su descuido.
Valga la aclaración que no deben confundirse con las arpías.
Habitaban la isla de artemisa donde guardaban los huesos de los marineros devorados por ellas.
Pero hubo un hombre que escuchó sus cantos y sobrevivió. Fue Ulises, héroe y protagonista de la Odisea, tradicional cuento de Homero. Se narra que Ulises ordenó a todos sus marineros que se taparan sus oídos con cera, pero que a él lo ataran al mástil del barco sin protección auditiva. Ulises al escuchar los cantos quedó hechizado y rogó a los suyos que los desataran para ir a nado hacia las sirenas, pero esto no ocurrió y sobrevivió.
Parténope, no pudo soportar el fracaso ante Ulises, y desesperada se arrojó al mar. Su cuerpo ahogado fue arrastrado a la orilla de una playa, ese lugar se erigió un templo y más tarde un pueblo, que con el tiempo sería Nápoles
Como los dioses van de la mano de la creencia de los hombres, y como esta cambia, crece o se desvanece en el tiempo, las sirenas aladas desaparecieron por varias razones. La primera es que la religión politeísta griega fue absorbida por la romana, y luego esta, perece a manos del cristianismo, desapareciendo todos los dioses del olimpo. Otra razón es que la leyenda de sirenas aladas nace en momentos en que la navegación más allá de los límites conocidos era muy peligrosa a causa de las débiles embarcaciones y de la piratería en regiones remotas, es decir que aventurarse más allá de los límites conocidos era muy arriesgado y este desconocimiento era llenado con la imaginación de seres mitológicos; cuando el imperio romano extendió su control tanto en tierra como en el mar y se crearon mejor mapas e instrumentos de ubicación, la navegación fue más segura.
Las sirenas tal como nos llega a nuestro tiempo (es decir mitad mujer, mitad pez) surge en los cuentos de la mil y una noche, cuento árabe que luego fue tomado con éxito en la cultura occidental. Hans Cristian Andersen en el siglo XIX termina de darles forma romántica a las sirenas con su cuento “La sirenita”.
Colón relata en sus bitácoras que se encuentra en América con sirenas pero que estas carecían de belleza, más tarde se descubre que se trataban de manatíes.